miércoles, 30 de marzo de 2011

Kol Nidrei Op 47 de Bruch

Esta pieza es mi favorita en momentos de tristeza. Nunca sé bien por qué una música me sirve según para qué momentos, pero, buscando el significado de su título, he averiguado que Kol Nidrei son las palabras en arameo que el "jazán" entona, antes de la puesta de sol, para iniciar la celebración del "Yom Kipur". La canción, que se repite tres veces in crescendo, dice así:
Todos los votos, obligaciones, juramentos y anatemas, ... que nos atan desde este Yom Kipur hasta el siguiente (cuya feliz llegada esperamos) quedan anulados. Quiera Dios redimir, absolver, perdonar, anular e invalidar y dejar sin efecto esos votos, que no nos aten ni tengan poder sobre nosotros, los votos no serán eficaces ni obligatorios, ni las promesas o juramentos.
El Kol Nidrei, pues, es una manera de escapar de los compromisos tan frecuentemente imposibles de cumplir (¡qué bien pensado!).

La versión musicada que presento es de Bruch. Existen otros Kol Nidrei (de Shönberg y Zorn), pero ésta es la que me inspira esa sensación de sentirme comprendida, arropada.

Inserto dos versiones. La primera es de Pau Casals. La segunda, sin duda para mí la más profunda, de mi admirada Jacqueline Du Pré.

 

viernes, 11 de marzo de 2011

Astor Piazzola



"Ella (1) me enseñó a creer en Astor Piazzolla, en que mi música no era tan mala como yo creía. Yo pensaba que era una basura porque tocaba tangos en un cabaret, y resulta que yo tenía una cosa que se llama estilo."

Astor Piazzolla
Piazzola


De no haber fallecido en 1992, hoy, 11 de marzo, cumpliría 90 años. Hasta hace poco era un bandoneonista (el "asesino del tango" lo llamaron algunos). Desde hace no mucho es uno de los grandes de la música.

De origen italiano, nació en Mar del Plata, pero se crió en un barrio de Nueva York, donde había hambre y bronca a diario. Se le daban bien los idiomas y, sobre todo, la música a la que empezó a dedicarse cuando tenía 16. Al regresar a la Argentina, estudió con Alberto Ginastera y, más tarde, gracias a una beca, marchó a París para estudiar con Nadia Boulanger. Para entonces, Piazzola todavía no se había decidido entre el tango y la música clásica. Fue Boulanger quien le aconsejó seguir con la música clásica "al estilo de Buenos Aires".

Me resulta muy difícil decidirme por una sola pieza, así pues os dejo con tres. Todas tienen un significado especial para mí. En primer lugar, "Balada para un loco", un tango que descubrí en una de esas eternas tardes de la despreocupada adolescencia. En segundo lugar, su Introducción a "Héroes y Tumbas", basada en la novela del mismo nombre de otro argentino, Ernerto Sábato (curiosamente, mi novela favorita durante años). Y, finalmente, "Adios Nonino". Un desgarrado llanto por la pérdida de su padre.







(1) Ella se refiere a Nadia Boulanger

sábado, 5 de marzo de 2011

El Adagio de Albinoni



Albinoni

Albinoni es, en realidad, un gran desconocido. Se sabe  poco sobre él. Lo que sí  es seguro es que el famoso Adagio de Albinoni no es suyo. Es una obra compuesta, ni más ni menos que en 1945,  por un musicólogo italiano, Remo Giazotto -fallecido no hace mucho, por cierto, y publicado por primera vez en 1958. El editor de la Casa Ricordi que lo lanzó, utilizó para publicitarlo la información falsa de que Giazotto se había inspirado en unas partituras de Tomaso Albinoni encontradas en Dresde tras la II Guerra Mundial. Sin embargo, tales partituras no existen o no se conservan en lugar conocido.